Sermones biblicos

ADVIENTO ANUNCIO DE PAZ

Isaías 9: 1 – 7.

Lucas 2: 14

INTRODUCCIÓN: (Ilustración: “El verdadero cuadro de la paz”

Se abrió un concurso pictórico sobre el tema “La Paz”. Fueron presentados diversos cuadros, representando uno, una mañana apacible, otro, una silenciosa puesta de sol; y otros temas similares. Sin embargo, el premio fue otorgado a un cuadro que representaba una furiosa catarata que precipitándose en un acantilado de roca levantaba densas nubes de espuma y vapor; pero en la rama de un árbol que se extendía por encima de la hirviente catarata, un petirrojo había construido su nido y gorjeaba alegremente.

Ciertamente el mejor concepto de paz es la que se puede obtener y gozar, no en circunstancias favorables, sino en medio del ruido y la tempestad. La hermosa ave se hallaba posado en una rama que tenía su raíz en la roca y se extendía por encima de la hirviente humareda de la catarata. En aquella altura nada podía ocurrirle. Así debería ser la paz de los que han puesto su confianza en Dios.

Sin embargo hablar de paz en un mundo convulsionado por las guerras y los odios, no es fácil de entender.

Hablar de paz, cuando a diario podemos oír y ver en las noticias como se destrozan los hogares y como dice el poema de Francisco de Asís, Hermanos a hermanas se hacen la guerra, gana los fuertes sucumben los débiles, no es fácil de entender.

Pero este tiempo de adviento anuncia precisamente eso “paz en la tierra”.

PROPOSICIÓN: Cada creyente en Jesucristo, es llamado a disfrutar de la paz que Dios nos ha dado como un don.

O.I. : ¿Pero que significa la paz que Jesús nos ha otorgado?

O.T.: El pasaje que hemos leído de Isaías nos muestra en sus profecías acerca de la llegada de Jesús algunas características de la paz que Dios Da.

1.    La paz que Dios nos ofrece, produce entendimiento

V. 2

²El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos. 

Tal vez como a muchos de la época de Jesús, nos resulte contradictorio en algunos momentos el nombre revelado por el profeta acerca de Jesús con el título “Príncipe de Paz”, pues sus palabras y sus acciones a muchos molestaban y muchos no las entendían, y es que así es la Paz de Dios a veces incomprensible, por ello Pablo declara en Filipenses 4: 7 ⁷Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento,

Jesús vino a traer Luz a aquellos que estaban en tinieblas,, a aquellos que cubiertos con el velo de la ignorancia estaban sumidos en la desesperación.

El monje Martín Lutero, encerrado en el convento sufría por no poder librarse de sus pecados, de tal forma que continuamente estaba en el confesionario, pidiendo se le aplicaran penitencias para restaurar sus faltas, pero a pesar de todo lo que el hacia no tenia paz interior, hasta que leyendo las escrituras encontró la luz al leer “El justo por la fe vivirá”, el entendimiento de la gracia de Dios llego a él produciéndole Paz a su vida.

Pero cuantos hoy todavía continúan maltratando sus cuerpos en penitencia por sus pecados, cuantos en estos días están listos a partir en peregrinación a la basílica y aun llegar y de rodillas recorrer kilómetros aunque sangre, para buscar el favor de Dios y tener  paz interior. Cuantos todavía necesitan recibir a Cristo, para que llegue la paz a sus vidas y el entendimiento de la oferta de gracia de Jesús. “Mas el justo por la fe vivirá”   

2.    La paz que Dios nos ofrece produce alegría. V. 3

³Multiplicaste la gente, y aumentaste la alegría. Se alegrarán delante de ti como se alegran en la siega, como se gozan cuando reparten despojos.

Siempre vemos las escenas de gozo y alegría, cuando por fin un pueblo envuelto en guerras a firmado la paz con sus enemigos. No mas violencia, no mas muerte, no mas llanto. Pero siempre los días de guerra dejan secuelas, y las gentes que estuvieron inmersos en el conflicto finalmente terminan su celebración y comienzan a vivir la realidad. Economías rotas, gentes sin trabajo, niños huérfanos, mujeres viudas, esa es la realidad de la pos-guerra, y la paz que al principio fue alegría ahora se convierte en llanto, por lo que les espera en el futuro.

Pero Jesús no nos ofrece  este tipo de Paz que causa alegría solo temporal, Jesús nos ofrece una Paz cuya alegría permanece para siempre. 2 Tesalonisenses 3: 16 ¹⁶Y el mismo Señor de paz os dé siempre paz en toda manera. Juan 16: 33 ³³Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.

Este es el tipo de paz que Dios ofrece, una paz que produce alegría permanente, pues el nos recuerda que nunca nos abandona.

3.    La paz que Dios nos ofrece produce Libertad. V. 4

⁴Porque tú quebraste su pesado yugo, y la vara de su hombro, y el cetro de su opresor, como en el día de Madián.

Nuestro mundo necesita ser reconciliado con Dios, nuestro mundo necesita de la paz que Dios ofrece para ser verdaderamente libres.

Las guerras no acabaran mientras los hombres sigan en control de sus vidas, y no estoy hablando solo de las guerras entre naciones o entre grupos, sino estoy hablando también de las guerras que se libran aun entre las propias familias, pues muchos de estas aun siguen prisioneros de Satanás. Pero Cristo quiere tomar el control de estas vidas y darles libertad.

Las guerras que hoy se levantan (personal, relacional, nacional o mundial) son fruto del egoísmo, de la falta de paz que su inicia en el corazón del hombre y se proyecta al exterior.  

Pero Jesús ha venido a quebrar este yugo, Jesús ha venido a rescatarnos de las garras de Satanás y a darnos la paz que produce libertad.  Efesios 2: 14 - 18

¹⁴Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, ¹⁵aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, ¹⁶y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades. ¹⁷Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca; ¹⁸porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre.

4.    La paz que Dios nos ofrece es eterna. V. 7

⁷Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite,

Adviento nos recuerda la llegada de Jesús, Adviento nos recuerda el cumplimiento de las profecías, adviento nos recuerda que la paz que Dios nos ha otorgado no tiene limites. Filipenses 4: 9 ⁹Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz estará con vosotros.

Cuanto tiempo Mateo 28: 20 y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.

CONCLUSIÓN: Estas son las características de la paz que Dios nos ofrece, Paz que produce entendimiento, paz que produce alegría, paz que produce libertad, paz que es eterna.

El Adviento nos hace un llamado a ser embajadores de esta paz, ha ser como Decía Francisco de Asís en su poema, Instrumentos de su paz. Anunciemos al mundo el nacimiento de el Príncipe de Paz.