sábado, 1 de octubre de 2011

Tiempo de agradecer.


Texto: 1Tesalonicenses 5:15-18:    «Asegúrense de que nadie pague mal por mal; más bien, esfuércense siempre por hacer el bien, no sólo entre ustedes sino a todos. 16 Estén siempre alegres,17 oren sin cesar,18 den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús.»

Introducción: 
Mateo Henry, el famoso autor del comentario que lleva su nombre, fue asaltado por unos ladrones que le robaron su cartera. Entonces él escribió lo siguiente en su diario: "Señor, ayúdame a estar agradecido; primero, porque nunca antes he sido robado; segundo, porque aunque se llevaron la cartera, no me quitaron la vida; tercero, porque aunque se llevaron todo lo que tenía yo, no era mucho; y cuarto, porque fui yo quien fue robado y no quien robó." Esto es un claro ejemplo de que nosotros debemos agradecer a Dios en todo. El pasaje que estamos estudiando nos muestra por lo menos tres cosas del porque debemos agradecer.
(1)    Debemos ser agradecidos porque es la voluntad de Dios.
(2)    Ser agradecidos por  lo que tenemos
(3)    Agradecidos por la Gracia Maravillosa de Dios.
1.    Ser agradecidos porque es la voluntad de Dios. —  ¿Qué quiere decir esto?  Quiere decir que Dios quiere que nosotros tengamos un espíritu de agradecimiento y no de queja. Cuando las quejas y la inconformidad nos acechan, es algo que se contagia.  La gente mal agradecida siempre se está quejando. Eso produce que los que están cerca de ellos todo el tiempo, empiezan a quejarse también.
a.    Noten las tres cosas que el Texto Sagrado dice que debemos hacer:
i.    Estar siempre gozosos.
ii.    Orar sin cesar.
iii.    Dad gracias en todo.
b.    Cada una de esas tres cosas que el Texto nos dice que hagamos, casi siempre van en contra de nuestras circunstancias, o sistema emocional. Cuando fijamos nuestros ojos en lo que DIOS ordena para obediencia, podremos comenzar a ver a la gente y a las circunstancias de una forma distinta.
c.    ¡Alégrense en el SEÑOR! Eso es una orden para nosotros. Es un deber el alegrarnos en las bendiciones que nuestro SEÑOR hace por nosotros. Veamos lo que Filipenses 4:4 dice:
i.    «Alégrense siempre en el Señor. Insisto: ¡Alégrense!5 Que su amabilidad sea evidente a todos. El Señor está cerca.»
ii.    Debemos aclarar que el apóstol Pablo al escribir esta carta, estaba preso. Aun en su condición, Él nos dice que nos ALEGREMOS O REGOCIJEMOS EN EL SEÑOR. Sigamos al siguiente punto sobre el por qué debemos estar agradecidos.
2.    Ser agradecidos por  lo que tenemos. — Gracias a Dios por tener lo necesario.
a.    Veamos lo que dice Filipenses 4:6:
i.    «No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias.»
b.    Es bueno y necesario planear para el futuro: estudiar, mejorarse económicamente, pero debemos recordar que debemos ser conformes y agradecidos.
c.    Todos somos diferentes, no podemos tener lo mismo que otra persona. En este tiempo de dar gracias, debemos examinar nuestras intenciones. La envidia es pecado delante de Dios. El agradecimiento por lo que tenemos, cancela la envidia. Por eso DEBEMOS SER AGRADECIDOS Y CONFORMES. Ahora continuamos con el último punto sobre el por qué debemos estar agradecidos.
3.    Agradecidos por la Gracia Maravillosa de Dios. — La mayor razón por qué debemos estar agradecidos es por Su Gracia maravillosa que nos ha otorgado una salvación tan grande.  Veamos algunos aspectos de la salvación que debemos pensar y estar agradecidos:
a.    Dios se interesa en nosotros llamándonos antes que pensemos en Él, y no rechazando al que viene a Él.  Juan 6:37 dice: «Todos los que el Padre me da vendrán a mí; y al que a mí viene, no lo rechazo»
b.    Dios nos ha dado una Salvación que es gratis, y es a través de la FE en JESUCRISTO solamente y no por obras. Esto quiere decir que lo único que Dios requiere de nosotros es OBEDIENCIA a través de la FE. Obedecemos a Dios porque CREEMOS A DIOS. La FE OBRA OBEDIENCIA. Veamos lo claro que está el Texto Sagrado en Romanos 5:1-3:

i.    «A la verdad, como éramos incapaces de salvarnos, en el tiempo señalado Cristo murió por los malvados.»
(1)    Noten la razón más grande por qué debemos ser agradecidos, y es porque aun siendo pecadores, Cristo murió por nosotros. Nadie puede jactarse y pensar que no necesita a Dios. JESUCRISTO no murió por nadie bueno. Todos somos pecadores y necesitamos la Salvación.
ii.    «En consecuencia, ya que hemos sido justificados mediante la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.2 También por medio de él, y mediante la fe, tenemos acceso a esta gracia en la cual nos mantenemos firmes. Así que nos regocijamos en la esperanza de alcanzar la gloria de Dios.»
(1)    La Paz que tenemos con DIOS mediante la FE  en JESUCRISTO, debe ser una ocasión todo el tiempo para estar agradecidos.
c.    ¿Has aceptado a JESUCRISTO COMO SALVADOR PERSONAL? Esa es tal vez la pregunta más importante que uno pueda hacerse a uno mismo